Clases de Taquimecanografía

Eulalia Navarro nos ha hecho llegar esta imagen. Son las papeletas de matrícula para el examen de Taquigrafía y Mecanografía. Acompaña también el siguiente texto acerca de estas clases:

"Se impartían a partir de las cinco de la tarde, en un aula que estaba por la zona de los gimnasios; recuerdo que para llegar atravesaba habitaciones y recovecos con pilas de colchonetas y grandes tuberías. La mayoría eramos chicas y sólo te apuntaban cumplidos los doce años, y como yo era del 31 de Diciembre (creo que soy la más jóven de todo el grupo, je je) no pude ir hasta 7º curso. Como eran 3 años tuve que terminar en el primer año de Instituto. Menuda gracia, por no decir otra cosa. La profesora, cuyo nombre no recuerdo, era estupenda y muy exigente, eso sí, usaba un perfume muy fuerte que tenía medio mareados a los de las primeras filas, que eran los de taquigrafía. Detrás estaban los de máquina y había un ruido infernal con todos tecleando a la vez. Qué decir de las máquinas de escribir...... nada que ver con la tecnología que tenemos ahora: Había unas de color gris, creo, bastante modernas para la época, pero otras merecedoras de estar, ya por entonces, en algún museo. Te tenías que ir a examinar al Instituto de San Isidro (Taquigrafía) o a la Plaza de la Villa (Mecanografía). Yo cada año en el examen de máquina miraba disimuladamente el texto que teníamos que escribir, que estaba puesto boca abajo, y me aprendía el primer párrafo para ganar unas cuantas pulsaciones.... pero ¡que nervios! cuando daban la orden de empezar y en tus oidos atronaba el ruido de las otras máquinas a toda velocidad...."